Éx 24,3-8 : “Esta es la sangre de la alianza que hace el Señor con vosotros” Sal 115, 12-13.15-18 : Alzaré la copa de la salvación, invocando el nombre del Señor. Hb 9,11-15 : “La sangre de Cristo podrá purificar la conciencia” Mc 14,12-16.22-26 : “Esto es mi cuerpo, ésta es mi sangre” Situada entre dos mares, con sus dos puertos, Corinto era el centro más importante del archipiélago griego, encrucijada de culturas y razas, a mitad de camino entre Oriente y Occidente. Su población estaba compuesta por doscientos mil hombres libres y cuatrocientos mil esclavos. Dicen que Corinto tenía ocho kms. de recinto amurallado, veintitrés templos, cinco supermercados, una plaza central y dos teatros, uno de ellos capaz para veintidós mil espectadores. En Corinto se daban cita los vicios típicos de los grandes puertos. La ociosidad de los marineros y la afluencia de turistas, llegados de todas partes, la habían convertido en una especie de capital de «Las Vegas» del Mundo Mediterrá...